
Entrevista La Raíz "Con la inmigración se está generando en España un odio muy peligroso"
Son uno de los grupos españoles que más conciertos van a dar durante este 2018 y, además, congregando multitudes. Viven un momento dulce de reconocimiento popular y conexión con sus seguidores, a pesar de lo cual, en noviembre cumplirán su palabra y se despedirán temporalmente con un último concierto en Valencia.
Siempre con el 'rockstizaje' por bandera, su combinación de rock, reggae y hip hop ha convertido a los de Gandía en clásicos contemporáneos gracias también a unas letras comprometidas con su propia visión del mundo. Por eso se les echará mucho de menos, aunque por suerte podremos disfrutar con ellos, antes del adiós, en tres conciertos con Rock Sin Subtítulos en Edimburgo, Londres y Dublín.
De esas tres citas -las únicas fuera de territorio español en todo 2018-, del presente y del futuro de La Raíz hablamos con su cantante y compositor del grupo, Pablo Sánchez, sin olvidarnos tampoco de mirar un poquito al pasado para cubrir la dosis justa de nostalgia.
Hola, ¿qué tal van las cosas por La Raíz con estos calores?
Van bien, estamos en un año muy intenso a nivel emocional pero estamos aprovechándolo al máximo.
No paráis de tocar y aún quedan cuatro meses de conciertos antes de la despedida en noviembre. Parece que tenéis más actividad que nunca después de haber anunciado el parón indefinido. ¿Cómo están los niveles de energía?
Estamos con el plus de energía que da el saber que va a haber un parón. Con este nivel de exigencia todas las semanas deberíamos estar mucho más cansados, pero hay algo que nos da alas cada año.
Los conciertos con Rock Sin Subtítulos son muy especiales. El público teje un lazo emocional con su tierra, con su familia, con su vida
Ante la respuesta del público, ¿estáis tentados de cambiar de opinión y no tomaros ese anunciado descanso o es una cuestión necesaria ya por salud colectiva?
No es que sea necesario por salud colectiva, no todos sufren lo mismo estos niveles de exigencia, muchos están a tope todavía y pueden seguir mucho tiempo más. Pero cuando el problema afecta al que compone o a los que componen no se puede exprimir ahora mismo algo por cuestiones de mercado o relacionadas con el éxito.
Resulta llamativo que después de tantos años de trabajo, justo decidáis parar cuando habéis conseguido estableceros con unos niveles de popularidad tan grandes. ¿Cómo se tomó esa decisión?
No es fácil encontrar las fuerzas o la inspiración para componer un disco para La Raíz, con todo lo que conlleva artística y logísticamente. La decisión se toma porque después del último trabajo, que fue de una composición larguísima y delicadísima, no había suficiente fuerza compositiva para afrontar algo similar. Como compositor principal, no podría vivir sacando algo que no me gusta para un grupo que ha sido mi vida. Como intérprete o público, quizá sí, pero como compositor habría sido fatal. Si lo vuelvo a hacer quiero que sea para mí un trabajazo.
Nuestro público es de todos los colores, edades, estilos, tribus... Y los lazos que ha creado con La Raíz son gigantes y serán eternos
Supongo que es más complicado de lo normal mantener a un grupo con once miembros... una familia o un equipo de fútbol, según se mire, ¿no?
Para nosotros no lo ha sido en realidad. Ha sido muy fácil, somos muy colegas y hay mucho respeto.
Hilando con lo anterior, el otro día en Tudela fuisteis noticia porque había tanta gente esperando vuestro concierto que no se pudo celebrar el tradicional acto de La Revoltosa en las fiestas. Eso da una muestra del poder de convocatoria que tenéis ahora mismo.
Es algo ingobernable, no lo podemos explicar. Es Brutal.
Foto: Irene Bernad
Por cierto, ¿os habéis parado a pensar cómo es vuestro público?
Es un público de todos los colores, edades, estilos, tribus... Es una pasada, los lazos que han creado con La Raíz son gigantes y creo que serán eternos.
¿Por qué creéis que conectáis tantísimo con vuestros fans?
No lo sabemos, pero creemos que es una cuestión que va más allá de la lógica. Creo que es una cuestión que se acerca más a las sensaciones que transmite una persona con una mirada, un gesto, y todo esto tan inmaterial que tienen las relaciones humanas. El público ve algo en nosotros que tiene que ver con la humildad, la cercanía, lo terrenal. Fuera de la proyección de estrellas, aunque es inevitable que haya una fantasía de idolatración en los más jóvenes.
Cantamos, nos quejamos, nos cagamos en lo que no nos gusta, pero no estamos cometiendo un crimen
La Raíz ha crecido muchísimo sin el apoyo de los medios de comunicación generalistas, a lo suyo como de costumbre dando espacio siempre a los mismos artistas, aunque no llenan para nada como vosotros. ¿Os molesta algo esto u os da totalmente igual? No pasa solo con La Raíz, pasa con un montón de grupos que importan a mucha gente pero no tienen hueco ahí...
No lo pensamos. Quisimos siempre estar fuera de eso. Es paradójico porque nos encantaría que en los medios sonara otro tipo de música y hubiera otro tipo de valores.
Estáis recorriendo España y las únicas tres fechas que tenéis fuera son con nosotros en Edimburgo, Londres y Dublín. ¿Qué podemos esperar de estas tres citas?
Una fiesta grande de música, contenido y fraternidad.
¿Qué tiene de especial actuar en estas ciudades tan repletas de españoles emigrantes forzosos en busca de un porvenir lejos de su casa? ¿Son veladas con un ambiente especial?
Son veladas muy especiales por eso mismo, es gente que ha tenido que marchar a buscar un futuro que en su país no tienen. En la sala ellos tejen un lazo emocional en esa hora de concierto con su tierra, con su familia, con su vida. Es algo muy fuerte.
Nos encantaría que en los medios sonara otro tipo de música y hubiera otro tipo de valores
Ya que os despedís temporalmente, nos gustaría que nos contarais alguna anécdota de estos 12 años de furgoneta compartida entre tanta gente. ¿Esos viajes son la parte más dura de la vida de un grupo o tienen su punto de romanticismo necesario?
Han pasado tantas cosas que no podemos destacar alguna concreta. Nosotros siempre recordamos con cariño algún concierto cuando empezábamos, que estábamos perjudicados y no pudimos hacerlo como tocaba. O algún fan absoluto que nos ha seguido de país en país... Entre ellos una persona de Ucrania y otra persona de Polonia.
Vuestro último disco de estudio, Entre poetas y presos (2016), se adelantó a todo lo que vino después contra la libertad de expresión en España. ¿Creéis que ya han pasado los tiempos más chungos al no gobernar ahora mismo el PP o tenemos que seguir alerta?
Hay que seguir alerta, porque la sociedad está caminando hacia atrás poco a poco y en España con el asunto de la inmigración se está generando un odio generalizado que es muy peligroso. En cuanto a la Ley Mordaza, somos jóvenes, cantamos, nos quejamos, nos cagamos en lo que no nos gusta y lo que nos gustaría cambiar, pero no estamos cometiendo un crimen.
Foto: Irene Bernad
¿Creéis que una canción puede cambiar el mundo?
No, pero puede hacer piña.
¿Podemos esperar proyectos de los miembros de La Raíz mientras dure la separación?
Claro. Somos artistas.
En 2018, después de todo lo vivido, ¿qué es el éxito para La Raíz?
Tener los máximos ratos de felicidad personal cada uno en su vida. La Raíz a nivel musical es un éxito desde que nació, por los valores que ha juntado en un grupo musical. Tener amistad, trabajo, consenso, solidaridad, aprendizaje personal y musical, profesionalidad en los escenarios que pisamos. Nos sentimos afortunados y exitosos desde el principio por todo esto.
Y para hacer boca, os dejamos con el video de la anterior visita a Londres de La Raíz, en junio de 2016. ¡Guerra al silencio!